Reflexión 3

 

La videoconferencia del día 28 de septiembre empezó de una de las mejores maneras, con una canción de Pink Floyd, y no una cualquiera, sino “Another Brick in the Wall”, que, desde mi humilde opinión, es uno de los mejores discos jamás hechos, “The Wall”. Cuya película y disco recomiendo encarecidamente, sobre todo la película del disco de la banda.

Hilando esta canción y la pregunta que nos hizo Lola en la VC sobre si “nuestras clases son agua o piedra”, se me viene a la cabeza otra de las canciones del disco llamada “The Trial”, donde juzgan al protagonista y empiezan con su acusación tal que así, “El prisionero que ahora está parado ante ustedes fue atrapado con las manos en la masa, mostrando sentimientos, mostrando sentimientos de naturaleza casi humana. Esto no puede ser”. Después llaman al que fue el profesor del protagonista y dice al tribunal “Siempre dije que él no terminaría bien. En realidad, su Señoría, podría haberlo desarrollado adecuadamente, pero mis manos estaban atadas. Los sentimentales y los artistas le dejaron salirse con la suya, déjenme amartillarlo hoy.”

Y es que mientras algunas veces nuestras clases pueden ser una piedra, ya que no siempre podemos dejar que fluya como el agua, el centro y, en muchos casos el Estado que dictamina la educación a través de los centros, nos obliga a seguir un plan del curso escolar que muchas veces no son más que repeticiones sin atisbos de reflexión o pensamiento crítico. Y si bien en “The Wall” subyace una crítica contra el fascismo y el sistema que lo genera y ampara, no se puede evitar pensar que es a través de la fabricación de “ladrillos” desde la más tierna infancia. Es entonces donde, a mi parecer, está una de las tareas más importantes como profesores que es la de educar a nuestros alumnos en la reflexión y pensamiento crítico junto con enseñarles a aprender por su cuenta, ya no para que no caigan en el crimen que resulta el fascismo, sino para darles herramientas como individuos libres de ataduras mentales, eligiendo eso sí, su propio camino. Ya que, a día de hoy, uno de los males de nuestra civilización occidental es la desinformación y falta de reflexión donde hasta lo que debemos pensar se nos resume y sintetiza para consumirlo. En resumen, debemos hacer que nuestros alumnos sean ese diamante que brilla como cantaban. "Shine on You Crazy Diamond"


Retomando la videoconferencia, se ha tratado el tema sobre el aula y su distribución y composición. En esta ocasión, no le habría dado muchas vueltas a cómo están los pupitres, tal vez porque no he enseñado en un colegio. Pero al ver la VC hasta el elemento menos llamativo puede tener implicaciones notorias como es este caso para trabajar según qué dinámicas de clase. Y una de las ideas que más me gustaron de la clase fue la de los rincones. Si bien esta idea la tratamos en una práctica, no le había dado muchas vueltas a los rincones dentro de nuestra aula hasta entonces, ya sea porque el centro nos dispone de un aula y difícilmente podamos cambiarla o porque no tenemos los recursos para cambiar varias aulas en un centro. Pero sí podemos acercarnos a nuestra aula ideal y construir algún rincón, dentro de nuestras posibilidades, junto con nuestros alumnos como, por ejemplo, crear una pequeña zona de descanso o un rincón de juegos de mesa, y estas ideas las veo bastante factibles para llevarlas a la mayoría de aulas e ir aprendiendo según las implemente en mis clases.

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